Las obras de Monasterio, y sobre todo, Sarasate y Falla, son un gran reto para todos los violinistas y están consagradas dentro del más virtuoso y se¬lecto repertorio de este instrumento. En este disco podremos escuchar la impecable interpretación de Ala Voronkova, que pone todo su talento, sus manos y su violín a disposición de estas composiciones excepcionales. Hay que decir que para hacer esta grabación los intérpretes se han servido de los violines Antonio Stradivarius Tartini-Vogelweith, de 1711 (cedido por Solé Luthiers) y de un Gio Paolo Maggini, de 1600, así como la guitarra Antonio Torres La Cumbre, 1858 (cedida por la señora Núria Trias)